Deliverance
Corrí en la noche, huyendo de mi marido y de la comunidad que me crió y me traicionó. Maltratada y magullada, con sólo mis pies descalzos para llevarme a través del bosque y bajando el Monte Awe, finalmente el agotamiento me reclama.
Dos días después me despierto en una cama que no es la mía, sin recordar cómo he llegado hasta allí. Anderson es dulce pero severo. Guapo pero robusto. Es todo lo que no sabía que existía, pero no puedo quedarme.
Ni siquiera por él.
Anderson
La encontré en la noche, rota y acurrucada contra un árbol para estar segura mientras dormía. Llevarla a mi cabaña fue fácil. Dejarla ir es imposible.
Sus inocentes ojos grises llaman a la bestia que llevo dentro y que está desesperada por reclamarla como propia. Su pasado quiere alejarla de mí, pero nada se interpondrá en mi camino para conservar a Del.
Ni siquiera sus propios miedos.
